Lei este Cuentito corto no recuerdo en que pagina y me parecio interesante compartirlo, tratando de adaptarlo a la realidad del Paraguay.

Se solicitó a un prestigioso asesor financiero que explicara el porque de la pobreza en Paraguay de una forma sencilla, para que la gente comun entienda sus causas.

Este fue su relato:

Un señor se dirigió a un pueblito donde nunca había estado antes y ofreció a sus habitantes 100 mil guaranies por cada burro que le vendieran.

Buena parte de la población le vendió sus animales.

Al día siguiente volvió y ofreció mejor precio, 150 mil por cada burrito, y otro tanto de la población vendió los suyos.

Y a continuación ofreció 300 mil Gs. y el resto de la gente vendió los últimos burros. Al ver que no había más animales, ofreció 500 mil por cada burrito, dando a entender que los compraría a la semana siguiente, y se marchó.

Al día siguiente mandó a su ayudante con los burros que compró de ese mismo pueblito para que ofreciera los burros a 400 mil cada uno.

Ante la posible ganancia a la semana siguiente, todos los aldeanos compraron sus burros a 400 mil, y quien no tenía el dinero lo pidió prestado. De hecho, compraron todos los burros de los alrededores del pueblo tambien.

Como era de esperar, este ayudante desapareció, igual que el señor, y nunca más aparecieron.

Resultado:

La aldea quedó llena de burros y endeudados.

Hasta aquí lo que contó el asesor. Veamos lo que pasó después:

Los que habían pedido prestado, al no vender los burros, no pudieron pagar el préstamo.

Quienes habían prestado dinero se quejaron a la municipalidad diciendo que si no cobraban, se arruinarían ellos; entonces no podrían seguir prestando y se arruinaría todo el pueblo.

Para que los prestamistas no se arruinaran, el Intendente, en vez de dar dinero a la gente del pueblo para pagar las deudas, se lo dio a los propios prestamistas. Pero estos, ya habian cobrado gran parte del dinero, sin embargo, no perdonaron las deudas a los del pueblo, que siguió igual de endeudado.

El Intendente dilapidó el presupuesto de la Municipalidad, la cual quedó también endeudada. Entonces pide dinero a otros ayuntamientos; pero estos le dicen que no pueden ayudarle porque, como está en la ruina, no podrán cobrar después lo que le presten.

El resultado: Los vivos del principio, forrados. Los prestamistas, con sus ganancias resueltas y un montón de gente a la que seguirán cobrando lo que les prestaron más los intereses, a parte a quienes no pudieron pagar su prestamo, debido a problemas familiares o a causa de que el clima no fue favorable para sus cultivos les expropiaron sus burros tasandolos a 50 mil Gs cada uno.
Cual es el resultado: Mucha gente arruinada y sin burro para toda la vida. La Municipalidad igualmente arruinada.